Fui concebida con una semilla y mucho amor.
Nací, crecí y sigo creciendo.
Mis raíces me nutren día tras día y me voy haciendo cada vez más fuerte.
Surgen ramas en mi camino que se bifurcan y tengo que optar.
Extendiendo mis brazos y toco, acarcio con suavidad al que a mi lado está.
Busco la luz entre la oscuridad.
Doy sombra y reconforto al que cansado está.
Miro al cielo y lo quiero alcanzar.
7/1/10
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10 comentarios:
que gran metáfora de la vida! Tu vida, mi vida. ¿Llegaremos al cielo?
Qué bonito, sin duda así es la vida, y lo más importante y gratificante: acariciar al que nos acompaña, gracias por tu visita y comentario, te sigo, un abrazo :)
Qué lindo Eli! Es que además... así sos vos!
Cariños.
Reconforta saber que existen personas como tú, me encanta la metáfora que empleas para definir tu actitud ante la vida, te felicito por ello.
Gracias por tu visita y comentarios.
Un beso, Who.
Eli:
Gracias por estar.
Sí, porque el cielo se encuentra siempre un milimetro arriba de nuestra cabeza! Gracias por tomarte la molestia de visitar mi humilde blog. El tuyo es estupendo!
Que bonita forma de expresar momentos de tu vida.
Saludos desde PTB,
Jorge Juan
Eli,
Me gustó mucho "tú" árbol de la vida.
Un beso
Hola Eli. Hermoso tu àrbol de vida. Por lo visto somos muy parecidas y valoramos la vida de igual forma. Un gusto leerte.
Saludos.
Mariela.
Hola Eli. Leì tu àrbol de la vida y me ha gustado mucho. Por lo visto Kari tiene razòn y nos parecemos mucho. Besos.
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