Resumen de una historia

Nos conocimos hace siete años

A los 15 días le tiré un balde de agua helada: "tengo cáncer".

Prometió ser mi soporte sin dudarlo un instante

Nos apoyamos mutuamente

Fuimos haciendo un camino mientras el pelo me volvía a crecer

Disfrutamos cada instante con sol

o con viento en contra

Festejamos noches de la nostalgia

Compartimos el gusto por pescar

y de estar cerca del mar

Inviernos

y veranos

mañanas

 y atardeceres

 ¿Qué más puedo decir?...

Desde aquel 15 de abril de 2005 no se separó de mi lado, fue mi compañero fiel y juntos redoblamos nuestras fuerzas al ir saltando las vallas del camino, lo que nos unió día tras día y nos permitió mantener siempre esa sonrisa que nos surge espontáneamente cuando estamos juntos.
Volví a ser feliz gracias a él.

Según averigüé, el festejo de los siete años se denomina "BODAS DE LANA", no parece muy romántico pero de todos modos coincide con el hecho de que lo considero mi querido abrigo protector.