23/6/12
19/6/12
GRZANE (cerveza caliente)
Cuando estuve en Polonia, un día que temblaba como una vara del frío que hacía, me convidaron con GRZANE, una bebida que me devolvió el alma al cuerpo.
Visto y considerando las bajas temperaturas que hay en Uruguay en estos días, les comparto la receta, tal vez a algunos le guste...
Ingredientes:
0,5 litros de cerveza
canela (mejor en rama)
clavos de olor
nuez moscada
azúcar o miel al gusto
Verter la cerveza en una olla ( esperar a que baje la espuma o retirarla)
En un mortero, aplastar un trozo de rama de canela y algunos clavos de olor
Verter la canela y clavo de olor en la cerveza, agregar un poco de nuez moscada (mejor si es recién molida)
Añadir el azúcar (2-3 cucharadas) o la miel y revolver
Calentar lentamente, revolviendo de vez en cuando
Apagar el fuego antes de que la cerveza empiece a hervir!
Ingredientes:
0,5 litros de cerveza
canela (mejor en rama)
clavos de olor
nuez moscada
azúcar o miel al gusto
Verter la cerveza en una olla ( esperar a que baje la espuma o retirarla)
En un mortero, aplastar un trozo de rama de canela y algunos clavos de olor
Verter la canela y clavo de olor en la cerveza, agregar un poco de nuez moscada (mejor si es recién molida)
Añadir el azúcar (2-3 cucharadas) o la miel y revolver
Calentar lentamente, revolviendo de vez en cuando
Apagar el fuego antes de que la cerveza empiece a hervir!
Mis queridos abuelos.
Tuve la suerte de tener a mis cuatro abuelos vivos hasta mis treinta años y pico de años . Ahora que no están, recuerdo con nostalgia y alegría a la vez, cada uno de los momentos vividos a los largo de mi niñez, adolescencia y juventud.
Ellos me enseñaron a caminar por la vida con seguridad, fortaleza y alegría.
También jugaron conmigo, me acompañaron, a veces me rezongaron, pero todo lo hicieron con un inmenso amor que siento hasta el día de hoy.
Los llevo en mi corazón todos los días y sé que tengo algo de cada uno de ellos (soy rezongona como la abuela Rosa, paciente como el abuelo Frañu, con humor ácido como el Tato y con una cuota de romanticismo como la Nona).
Ellos me enseñaron a caminar por la vida con seguridad, fortaleza y alegría.
También jugaron conmigo, me acompañaron, a veces me rezongaron, pero todo lo hicieron con un inmenso amor que siento hasta el día de hoy.
Los llevo en mi corazón todos los días y sé que tengo algo de cada uno de ellos (soy rezongona como la abuela Rosa, paciente como el abuelo Frañu, con humor ácido como el Tato y con una cuota de romanticismo como la Nona).
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